Este libro de Lynne MacTarggat, una reconocida autora, enfoca una idea simple pero bien sustentada: la mente tiene poder sobre la materia. Cobra sentido al proponer:
Que nuestros pensamientos y nuestras intenciones son más poderosos de lo que creemos pues poseen una energía que puede cambiar nuestra realidad física.
Si la energía de pensamiento es pura, lo que generamos, lo que creamos en la misma sintonía.
Los pensamientos son campos electromagnéticos.
La mayor efectividad de la intención dependía de los campos magnéticos de la tierra
El lugar desde donde se emana la intención por medio de los pensamientos es fundamental para obtener el resultado deseado.
El ser humano tiene que trabajarse a sí mismo para poder actuar sobre lo que emite al exterior con cada pensamiento.
La intención no es algo que la persona hace, sino fuerza que existe en el universo como campo de energía invisible.